Todo el mundo nace, vive y muere, y todos disponemos de un tiempo determinado, a este tiempo en el que transcurre nuestra existencia lo llamamos vida. Todos hacemos lo que queremos con nuestro tiempo, y quizás no nos demos cuenta del bien tan preciado que es. Nadie elige el tiempo del que dispone, ni nadie puede obtener más tiempo del que tiene, entonces... ¿Qué deberíamos hacer con este bien? Solo hay una respuesta posible a esta pregunta. Aprovecharlo.
Todos sabemos cuándo hemos nacido pero no cuándo vamos a morir, y en cualquier momento la muerte nos puede hacer una visita y llevarnos con ella, repito: En cualquier momento. Es por eso por lo que este bien es tan valioso, por eso mismo yo te digo: ¡vive cada momento como si fuera el último!, no tengas prisa por crecer y ser mayor, que el tiempo se pasa muy rápido y luego te arrepentirás. Si piensas que el colegio es una pérdida de tiempo, piensa dos veces todo lo que estás aprendiendo, y cuando seas mayor agradecerás cada una de las horas de estudio que te has echado, pues te servirán en el futuro. Utiliza tu tiempo en tener una buena vida. Al final de tus días pregúntate a ti mismo ¿Ha merecido la pena todo este tiempo vivido? Si la respuesta es sí, enhorabuena, has aprovechado tu tiempo, pero si es lo contrario... Has desperdiciado tu vida.
Una vida bien vivida es una vida bien aprovechada y es una en la que hemos conseguido ser aquel que queríamos ser.
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